martes, 29 de junio de 2010

León

Y aquel león de piedra que posaba inmóvil en aquel lugar, de repente tomo vida y al poco rato inclino la cabeza mostrando su resignación y bajó la mirada al suelo con gesto triste, en ese mismo instante, se volvió a petrificar... sin embargo, si te tomas la molestia y el tiempo de acercarte lo suficiente, se puede apreciar una ligera sonrisa oculta entre sus facciones, pues en el tan corto espacio de tiempo que pudo conocer la vida, a pesar de saber que no iba a ser eterna y a pesar de ver que se le acababa... supo que habia valido la pena.. por unos segundos.. fue feliz.. y eso .. eso no se lo va a robar nadie y esa sensación lo acompañará siempre.