miércoles, 31 de mayo de 2017

Empapelado de sueños


Y a pesar de permanecer injustamente encerrada acompañada única y exclusivamente de su soledad, ella nunca perdió la ilusión por alcanzar la verdadera felicidad... y empapelaba sus frías y duras paredes de hermosos y cálidos sueños...  su mundo ya no perfecto, ordenado... todo lo contrario, disfrutaba de saltarse las normas, hacia lo que realmente sentía a cada instante sin importarle lo más mínimo quien la viera o que pensaran... su única preocupación era planear el modo en que todo aquello que anhelaba dejara de ser un sueño y convertirlo en realidad aun sabiendo que todo quedaría al final en sueño y fantasía dentro de su cabeza.


Tiempo a la deriva



Y justo en ese preciso instante, se paró el tiempo... explotaron todos sus sentimientos entrecruzados creando una tormenta de emociones esparcidas sobre un mar de lágrimas... miró a su alrededor y por primera vez fue consciente de la verdad, su vida ya no era la misma, se preguntaba en su cabeza si alguna vez había tenido alguna... flotaban sus recuerdos sobre sus aguas... todo estaba oscuro, roto y en un silencio absoluto que la atemorizaba... miro su reloj... marcaba las seis menos cuarto, esa fue la última vez que las agujas que marcaban su vida habían tenido vida... empezó a recordar como la habían guiado durante el transcurso de su existencia, era alegre, noble y conformista... siempre disfrazando sus penas en alegrías para poder ser feliz, una felicidad que realmente no existía... y justo a las seis menos cuarto sus miradas se cruzaron y comprendió que nada había sido real... su naturaleza era exigente, rebelde, pasional... de repente se rompió ese silencio infernal... lentamente reconoció ese sonido... eran latidos, se puso la mano sobre el pecho y pudo sentir como la golpeaban recordándole que aún estaba viva...  lentamente fue moviéndose entre los pedazos rotos flotantes buscando la salida... y ahí lo vio... de repente las aguas se fueron abriéndole camino a modo de pasillo hacia una escalera cargada de ilusiones nuevas... una nueva oportunidad para reparar el tiempo perdido....



abriendo las alas

Y se cansó de permanecer inerte sobre aquella fría y dura piedra que la sostenía en un inmenso sueño... se levanto mirando al cielo justo en el preciso instante que una bandada de pájaros migraban hacia un destino desconocido para ella... escuchó el sonido de las aves hasta que el ruido que emanaban se convirtió en música para sus oídos, y comenzó a danzar hacia ellos y elevarse con ellos para así liberarse de sus cadenas invisibles, sentirse libre y con toda la fuerza que hasta ahora había estado dormida en su interior, buscar el destino deseado dónde hallar su felicidad...


Danzando

Y atrapada quedó en el oscuro paisaje sin vida terrenal, un hechizo la condenó a bailar sin más acordes que los latidos de su corazón frente a una puerta sin acceso esperando a que un amor verdadero rompiera la barrera invisible que no la dejaba volver a la vida... una vida de luz y de música celestial... ella se hizo fuerte y nunca dejó de danzar, pues solo le quedaba eso para saber que estaba viva y recordar que aún podía sentir... mientras bailaba cerraba los ojos, y de puntillas y descalza danzaba suave imaginando y anhelando que su alma gemela desde esa otra dimensión escuchara sus latidos y así captar su atención, y que fuera a rescatarla y sin abrir sus ojos sentir el tacto de sus dedos entrelazando los suyos y acompañarla al mismo compás hasta que ambos corazones se unieran en un solo latir de una forma tan mágica que la música empezará a sonar... abrir los ojos y chocarse con su mirada... dulce y segura... le regala una sonrisa y estirándola con fuerza hacia su pecho sentir por primera vez en mucho tiempo lo que es dejar de sentir frío y sin dudar ni un instante poder abandonar ese oscuro y silencioso lugar y atravesar esa puerta mágica despidiéndose con una sonrisa de su soledad. 
  



Mundo al revés...

Y ahí estaba yo... en mi mundo al revés, con las nubes bajo mis pies mientras me columpiaba entre mis sueños e ilusiones... con el vaivén entre lo que sueño y lo real... veía  sobre mí el duro y frío suelo por el que el resto del mundo caminaba de pie... y a veces me preguntaba quién se equivocaba... si ellos por andar sobre seguro o yo por columpiarme al vacio entre la seguridad o lo que anhelo...